11.03.2012

«Adiós a la niñez»

Adiós Peter Pan,
se aleja mi niñez
dando pasos de gigante
convertida en mujer.

Adiós Peter Pan,
el eco de los niños
que no quieren crecer.
y sólo juegan
me ha hecho recordar
que tuve sueños
que nunca jamás podrán cumplirse.

-Ana Merino.

5.14.2012

«Adolescencia»

En el balcón, un instante
nos quedamos los dos solos.
Desde la dulce mañana
de aquel día, éramos novios.

No se atrevía a mirarme;
le dije que éramos novios,
...y las lágrimas rodaron
de sus ojos melancólicos.

-Juan Ramón Jimenez.

5.13.2012

Tengo una meta para este año. Es simple, sencilla y a la vez compleja. No quiero quedarme con ganas de hacer nada. Quiero vivir de impulsos, poder decir "no" o "sí"... pensar "¡a la mierda!" cuando algo me preocupe, aunque tenga ganas de hacerlo, y hacerlo. Sin remordimientos. 
Sacar la lengua, y reírme hasta perder la voz. Derrumbar muros con mis palabras. Levantarme de la cama siempre con ganas de sonreír. Hacer que la gente se pregunte ¿porque?, ¡¿porque?!. Tragar nieve, abrazarte con mis piernas. Quiero que nada tenga sentido. Absolutamente nada. Enmarañarte en mi mente, ¡que tiemble el suelo!. Tener una vida jodidamente especial.
 Y quiero, que al mirar atrás, diga: ¡Y lo que me queda!, con una sonrisa, y sin haberme arrepentido de nada. 
En resumen..., ¿es una buena meta, no?. Deberías hacer lo mismo.
La gente que desperdicia su vida, apesta.

5.12.2012

Dancing in the moonlight.

5.11.2012

Tengo miedo de dejarte, y necesitarte demasiado rápido.
Tengo miedo del miedo por ser tan oscuro. Tengo miedo del silencio porque grita la verdad. Tengo miedo de que algún día todo esto se haga realidad. Tengo miedo de que mis palabras rimen, porque eso quiere decir que digo la verdad. Tengo miedo de mentir, porque suena muy realista. Tengo miedo de la realidad porque no te deja soñar. Tengo miedo del sueño por no despertar. Tengo miedo de llorar, por si hago un mar. Tengo miedo de que te vayas, por si te voy a necesitar.



Yo creo que los cuentos de hadas nunca han existido, todo es una mentira para hacerte ilusiones.
De niña todo son príncipes y princesas, encerradas en su castillos por una horrible bruja que quiere... ¿Matarla? Pero justo en el momento idóneo aparece su príncipe y se la lleva a caballo para ser felices en otro lugar. Tú te lo crees, porque piensas que todos tenemos nuestro destino ya elegido, nuestro príncipe y que todas somos princesas. ¿Pero qué pasa cuando en el mundo sobran princesas? ¿Cuando las princesas se convierten en zorras? Lo que pasa es que has crecido, tú no eres una princesa, y da gracias si te sientes como tal. No existe ese príncipe, tan sólo son historias rotas a pedazos a medida que creces. Yo también quiero ser princesa.